15 de marzo de 2013

In Malta, why not?

Hace un año, saber a cuánto ascendía mi prestación por desempleo, era una de mis principales preocupaciones. Sin embargo, siempre había dicho que en cuanto tuviera tiempo, volaría en busca de un curso de inglés. Así que cambié cobrar el paro, por gastar mis ahorros en una nueva experiencia.

Y como mi cuenta no estaba muy boyante, Malta fue el lugar elegido, por precio y climatología. Pensaba que si la cosa salía mal, la soledad y el arrepentimiento serían mucho más llevaderos junto al mediterráneo que en una lluviosa ciudad inglesa.



Y salió tan bien, que al final prolongué mi estancia. Y mi inglés mejoró notablemente. !Mi propósito era muy firme! 

De esas pequeñas islas me traje un buen nivel idiomático y sobre todo una nueva familia. Es increíble como períodos tan cortos de tiempo, pueden hacerte vivir con tanta intensidad. Aquello fue una experiencia idiomática y sobre todo una terapia para la mente. Otros intereses, otras prioridades, otros problemas, una cura de humildad y un chute de vitalidad.
Cómo en tan sólo unas semanas, se pueden hacer amistades tan intensas. Cómo el idioma deja de ser una barrera, para convertirse en una forma de vida. Cada conversación, cada risa, cada mirada, una nueva experiencia.  Allí celebré mi 30 cumpleaños y nunca lo olvidaré.

Muchos habréis escuchado que Malta es un país al que los españolitos van de borrachera. Pues sí, de eso también hay, sobre todo en verano. Pero ese pequeño paraíso también es una torre de babel en la que aprender mucho de culturas y formas de vivir. En la que cambiar el ritmo y ser conscientes de que somos una pequeña hormiguita, con problemas muy similares (o menores, o mayores) a los de los demás. 

Es cierto, que ese tipo de vivencias cambian y también es cierto que una vez de vuelta a la rutina, a tu país de origen, acabamos pensado y sintiendo como antes. Cuando regresé, decidí que el espíritu maltés debería mantenerse en mí, así que cuando alguna duda absurda, asalta mi cabeza, aún escucho a alguien decir, Why not? Y en ese momento recuerdo que las situaciones y los problemas están para enfrentarlos, aunque muchas veces me cueste, procastinación...

Además allí nació este blog, y siempre tendrá una pequeña parte de cada uno de los que vivieron, conmigo, allí.

Feliz fin de semana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario